CULTO CATOLICO
28 Agosto 2007 - 23:29 (@ : La Ciudad)
MAS DE 2500 PERSONAS PARTICIPARON DE SUS ACTIVIDADES
El Movimiento de Jornadas cumple 30 años en Avellaneda
El Movimiento de Jornadas de Vida Cristiana de la Diócesis de Avellaneda-Lanús cumple en octubre sus primeros treinta años de labor cristiana y festejará en diciembre convocando a las más de 2.500 personas que pasaron por el movimiento a lo largo de estas tres décadas.
Este Movimiento de la Iglesia, nacido hace cuarenta años en Rafael Calzada, Diócesis de Lomas de Zamora, llegó a Avellaneda diez años después de la mano de los sacerdotes Roberto Toledo y José Correia, quienes participaron de aquella experiencia.
Según explicó su presidente, Vanesa López, el Movimiento de Jornadas «es un encuentro con Dios muy especial, también un encuentro con uno mismo, con la comunidad y con la Iglesia, es como un retiro espiritual, pero mucho más fuerte».
El vicepresidente del Movimiento, Mauro Acedo, agregó que «es un retiro en base a charlas testimoniales, dadas por los mismos jornadistas, en cuatro días ves una catequesis profunda, pero mechado con lo testimonial».
«Lo que tiene de particular es que un joven de tu misma edad es el que te está contando como vive su vida con un ideal cristiano. Eso es lo que nos acerca mucho, que el que nos habla es un par», comentó Vanesa.
Consultado sobre los objetivos de cada uno de esos retiros, Mauro afirmó que «como en todo apostolado, la idea es llevar a Cristo y tratar que la gente pueda encontrar el sentido de su vida en la voz de Dios».
«Lo bueno es que es amplio, es para todos –comentó Vanesa- para aquel que está trabajando en la parroquia, para aquellos que tomaron la comunión y nunca más pisaron una o para aquellos que está peleados con la Iglesia como estructura».
Cada una de las Jornadas, en las que participan cerca de 35 personas, tiene una metodología muy especial, que no tiene ningún otro Movimiento y no se improvisa lo que se hace en cada una de ellas, todo tiene un motivo y cada día una consigna en particular.
Una de esas cuestiones es sin duda la sorpresa a la hora de las actividades, para lo cual es indispensable que cada uno de los que haya participado en una jornada se lleve para sí su logro del encuentro, pero que no comente qué es lo que realmente se lleva a cabo.
Cada uno puede participar solo una vez de las Jornadas, salvo aquellas organizadas para los que ya tuvieron la primera experiencia, para garantizar que el grupo esté en igualdad de condiciones en cuanto a la experiencia. La idea es descubrir juntos cada una de las cosas y compartir cada día de la Jornada.
«Como cada jornada se hace con gente distinta, por eso decimos que la experiencia es única e irrepetible, porque cada testimonio de vida es distinto», aseguró Mauro.
Para participar en el Movimiento de Jornadas hay que tener entre 21 y 35 años aproximadamente, aunque esos límites no son fijos. «Tiene que ver con la realidad de vida, si un joven de 33 es soltero y va a la facultad capaz que se incluye bien con la comunidad, pero si está casado y con chicos quizá, no es que no pueda hacerlo, pero no va a compartir la realidad con los que están en el grupo», manifestó Vanesa.
Luego de ese primer encuentro, que se desarrolla en dos partes (una para varones y otra para mujeres), los jornadistas se reúnen todos los primeros viernes de cada mes para reforzar la experiencia vivida y, en algunas ocasiones, participan como ayudantes en las jornadas siguientes.
«Después, cada dos años, se hace una jornada mixta con todos aquellos que participaron del primer encuentro, que te ayuda a profundizar lo que viviste en la anterior oportunidad», informaron.
Finalmente, cabe destacar, que los aspirantes a ingresar al Movimiento son presentados por los propios jornadistas o bien pueden acercarse a la parroquia más cercana para que el propio sacerdote los presente.
Para solicitar más información, los interesados pueden ingresar a www.catholic-church.org/mjvclanave ó escribir a mjvc_sec@yahoo.com.ar
parecida a la jornada 28 femenina, “por tu amor Jesús, una nueva vida, un nuevo discípulo” refleja el objetivo que tenia el Señor de renovar a esto Hombres en su nombre y hacerlo sus discípulos, para que en Él encuentren el verdadero sentido de vivir y un nuevo ideal.
